Señoras y señores, queridos amigos, buena gente.
Parece mentira pero en estos años de impulso en las nuevas tecnologías de la comunicación sigue utilizándose la táctica del rumor. Por un lado, para comprobar cómo podría sentarle a un colectivo la confirmación del cotilleo; por otro, para provocar con los cuchicheos diferentes posicionamientos del público interesado.
No hace falta que hayan servido a la patria como soldados para recordar la famosa frase «Aquí Radio Macuto, mil paridas por minuto». Por lo visto tiene sus orígenes en las trincheras de la Guerra Civil española donde se especulaba, a veces con malicia, a veces con sentido, las diferentes noticias no oficiales que circulaban en la tropa ante los avances o retrocesos de los frentes de batalla.
En este caso la palabra «macuto» que significa mochila y que se utilizaba en la época militar, era solamente el título previo a la información no contrastada y que era una advertencia sobre su credibilidad.
Aparece Sanllehí en el Museo del Fuego de Bomberos, sugiere algo Escribá en sus declaraciones, Cordero surge asumiendo su lealtad al entrenador al mismo tiempo que deja bien claro que quien manda es él, mientras que a través de los medios también se elaboran opciones de futbolistas que pueden ajustarse al modelo del nuevo proyecto.
Las redes multiplican esas posibilidades, desde las asesorías de futbolistas se muestra sus carteras de jugadores y los más jóvenes se ponen en las órbitas balompédicas para configurar estrategias de traspasos.
Todo esto sin conocer el límite salarial de una temporada que aún no ha comenzado, especulando con la subida de los abonos y movilizando a los socios de tal manera que se produzca un batiburrillo que obligue a caminar a dos por tres calles a los zaragocistas.
Tácticas de Radio Macuto cuando se tiene a los medios al lado del sillón real y a diferentes bufones que se conforman con divertir a la nobleza.