Señoras y señores, queridos amigos, buena gente.
Regresamos otra vez a la táctica del silencio después de las comentadas declaraciones de Alberto Zapater que han posicionado a gran parte de la afición zaragocista a favor y en contra del futbolista. Son demasiadas las veces que el capitán del Real Zaragoza ha sido utilizado como portavoz por parte del club para que se desvíe la atención del rumbo del equipo.
Mientras tanto, apenas movimiento en la web del club y cierta distancia con respecto al partido del sábado frente al Málaga. Da la impresión que no estará Iván Azón pese a los progresos de su recuperación muscular aunque no hay nada oficial al respecto.
Tampoco, apenas se ha entrenado, si seguirá Ratón en la portería del Real Zaragoza frente al Málaga; de entrar Rebollo sería una sentencia para el meta gallego pero, si juega y no está acertado, la Romareda buscará un culpable porque necesita personalizar los fallos del club.
De no se conseguirse los tres puntos, si no ofrece el equipo otra imagen ante su público, Raúl Sanllehí va a tener un problema grave. La situación no está como se la pintaron al actual director general, con una afición ilusionada y con unos medios afines y sin más opinión que la que emana de la dirección.
De todas formas es imprescindible que se convenzan que quienes más deseos tienen de disfrutar, de aplaudir, de soñar con el ascenso, son los propios aficionados. Y personas que llevamos muchos años en la comunicación, jóvenes con fuerza en la red, que pese a nuestra diferencia generacional seguimos luchando por una información accesible y una opinión libre para nuestros seguidores.