Señoras y señores, queridos amigos, buena gente.
Se asomaron ayer varias caras interesantes para la afición del Real Zaragoza a través de los medios de comunicación después de conocer la renovación de Torrecilla como asistente de Sanllehí.
Jorge Mas, el presidente, apareció en la fiesta tradicional de los patrocinadores del club a través de una pantalla con un video agradeciendo la disposición y el apoyo de las empresas que colaboran económicamente con la entidad.
Amable y cercano, como siempre, el máximo exponente del Real Zaragoza habló de los valores del club, agradeció el esfuerzo de cada uno de los patrocinadores y lanzó un mensaje de tranquilidad de cara al proyecto.
Juan Carlos Carcedo, que también estuvo allí, hizo el habitual recorrido por los diferentes medios de comunicación de la ciudad desde el punto de la mañana hasta la tarde. Ya había participado en la rueda de prensa cuando se hizo oficial su fichaje y el club envió a través de su web una entrevista con el técnico.
Se le vio al final cansado, es lógico, pero mantiene en su razonamiento los principios globales de su idea futbolística y objetivos del Real Zaragoza en el plano deportivo, que pasan por el corto plazo y la necesidad de gol en su planteamiento táctico.
También habló Fernando de Yarza, muy simpático desde su posición de salida del club valorando muy positivamente el trabajo de la Fundación y culpando de lo malo a cierto sector de la afición y a determinados comunicadores que no entraron en la carroza nupcial, de la fiesta de las familias, con poder en la capital aragonesa. De la misma forma que cuidó a su encargado de confianza, Luis Carlos Cuartero, que se marchará del club.
Cada vez me parece más espectáculo de prensa amarilla, de club de amigos frente al consumidor y del alejamiento del show económico y mediático en el que se está convirtiendo el fútbol.
No olviden que este negocio lo llevan dos personas muy peculiares y que se enfrentan entre sí: Javier Tebas y Luis Rubiales.