Señoras y señores, queridos amigos, buena gente.
Pasaron la mañana, la tarde y la noche del primero de febrero y se cerró el mercado de invierno. Para gran parte de la afición zaragocista con escaso negocio del club y muy pequeña aportación al potencial del equipo de cara a esta segunda vuelta ya comenzada.
Imanol García, Kaiki Fernándes, Oso e incluso Juan Cruz estuvieron en el objetivo de los medios convencionales locales para el Real Zaragoza pero llegaron solamente dos, Akim y Guti, además de Édgar Badía que se incorporó al comienzo de la segunda vuelta.
Sorprende lo de Akim Zedadka que no sonaba en las quinielas y agrada el regreso como cesión de Raúl Guti que ha puesto absolutamente todo de su parte para volver a Zaragoza y lo hace con ilusión y como un reto personal. A Bermejo se le ha cedido al conjunto ilicitano y Poussin que estaba encaminado a recalar en Albacete al final dijo que se quedaba en Zaragoza.
Se espera la total recuperación física y psicológica de Bakis y la aportación, seguramente desde el banquillo, de Iván Azón que da todo lo que puede pero que no es el referente goleador necesario para el equipo.
Seguirá, en consecuencia, el mismo esquema y si no se consigue una oportunidad muy sencilla en el mercado del paro, se buscarán los cincuenta puntos y, a partir de ahí, se planteará con las jornadas que resten el final de la competición de Liga.
Solamente ha dicho el presidente Jorge Mas que el Real Zaragoza debía conseguir el ascenso. En unas declaraciones enmarcadas en las fiestas del Pilar y la Navidad, con un cuatro por ciento de las acciones de la propiedad. Sanllehí, Cordero y Velázquez, cada vez menos valorados, hablan del «partido a partido», lo mismo que han indicado a los futbolistas de la plantilla.
El día de hoy ha sido tranquilo, sin apenas comentarios en los medios escritos y audiovisuales, como cerrando una puerta al descontento y a la sorpresa de la afición, que hace una pausa de fin de semana para comprobar qué es capaz de hacer su equipo el lunes frente al Sporting de Gijón.
Pero esa es ya otra historia y se la iré contando a lo largo de estos días.